15 de Diciembre de 2021

Soy María de los Ángeles Debiase y trabajo en la Mutual en Sede Central. Cuando empecé archivaba las fichas de todos los fondos complementarios que se habían dado y esto lo aprendí sola, lo analizaba; fui leyendo, miraba el dorso donde estaba toda la liquidación y lentamente fui sacando las liquidaciones y firmando la carpeta. Pasó el tiempo y hay gente que se asoció en aquel momento y todavía la sigo atendiendo.

Estuve siempre en la parte operativa y administrativa, podría decir que por mi escritorio pasan casi todos los papeles de la entidad.


Cuando llegó a la gerencia el Dr Alberto Ferraro trabajé muchísimo con él, hemos preparado muchas de las Asambleas juntos; al principio me toco explicarle lo que sabía sobre la manera de hacer las cosas para poder funcionar; aparte de los directivos por supuesto que también se ocuparon de eso.

Conozco a todos los directivos que actualmente manejan la mutual desde la ventanilla para fuera; tengo una relación de amistad, nos conocemos hace muchos años y trabajamos codo a codo, hemos vivido en lo laboral y personal muchas situaciones buenas y malas, aunque eso no significa que no mantenga mi lugar.

Ahora hay un nuevo gerente que es Francisco Pérez con quien me llevo bien; en realidad, me llevo bien con todos. Santiago Lupo el anterior presidente de la entidad, me decía que yo era la gallina con todos los pollitos atrás; porque todos querían estar conmigo supongo que para verme trabajar; yo no hacía nada; soy más bien introvertida; no me gusta hacerme ver, o hablar, lo que yo trato es cuidar a las chicas; a veces cubrirlas y si alguna hizo algo mal, le explico a ella, pero no lo pongo en boca de todos y me parece que es como debe ser y que, si lo sentís así, debe ser así.

En la parte administrativa estoy siempre en comunión con la necesidad del asociado. En su momento era la supervisora de toda la mutual, si había algún problema con algún asociado, lo atendía, escuchaba, trataba después de hablarlo con el gerente, entonces confeccionaba un historial para que el gerente lo lleve al Consejo y la verdad que siempre mi recomendación ha sido tomada en cuenta para la resolución de cada caso.

"Primero estuvimos en la Contaduría del Ejército, en Piedras 141 y en el 2006 ya nos mudamos a la Avda. Roca a un edificio hermoso, con más comodidad; antes trabajaba 8, 9 ó 10 horas en un cuarto cerrado, no se veía la calle. Hoy mi oficina tiene un ventanal, y es otra forma de vivir trabajar con la luz del día".


"La mutual está funcionando bien; trata de crear y de dar servicios al asociado cuidando siempre de no llevarlo a la morosidad en su cuota, por ciertas compras fuera de su alcance."

Tenemos referentes que son los representantes a quien un grupo de socios de cada provincia elige para que lo represente y es quien se ocupa de los trámites y está en constante comunicación con la entidad.

Tengo con ellos un fluido intercambio y de ese modo se conoce el carácter; la forma de ser de las personas, aunque ahora con el avance de las redes sociales, de la tecnología, lo que pasa es que el asociado se tira a llamar; se empieza a comunicar directamente por esos nuevos canales y ese asociado es en realidad el que hoy está llegando mediante el "boca a boca" a los pocos civiles que hay, para que se acerquen a la Mutual.

Un socio activo civil aporta un 4%, mientras que el que aporta 3% que puede ser militar o no, tiene una cobertura de sepelio propia, no familiar; si quiere la familiar también se lo podemos brindar, pero ya cuenta con una cobertura y el ejército últimamente la solicita. Entonces en vez de pagar en otro lado, pagan en la Mutual por los servicios que reciben dentro de la cuota.

Desde que ingresé, la Mutual creció mucho. En plena pandemia el nuevo gerente me puso de jefa operativa y desde ese lugar armé un grupo de chicas que responden muy bien y nunca me imaginé que íbamos a vender así en un año; hemos vendido tanto como en todos los demás años juntos.


"A la Proveeduría virtual la llamamos M Shop. Esto ya lo veníamos hablando con el Dr. Ferraro desde hacía tiempo, yo le decía que tendríamos que hacer algo para que el asociado tenga descuentos y con el tiempo pudimos concretar la Proveeduría."

"Para dar la facilidad al asociado buscamos precios y armamos un sistema de pago mediante un préstamo, que lo saca en 18 cuotas y está feliz. A los seis meses de implementado M Shop, desde el interior compraron colchones y somieres, y muchos otros productos y la verdad que en eso estoy contenta; para mí la Mutual creció; tuvo en algún momento bajones, pero eso pasó en casi todos lados."


"Se hicieron dos burbujas para ir a trabajar. Yo no puedo ir por un tema de salud, tengo problemas de columna y no puedo caminar, me cuesta y me da miedo; por eso estoy trabajando desde mi casa y la cantidad de préstamos que damos al interior es impresionante. Primero pasa por las manos de las chicas que atienden y después, todo pasa por mis manos; por supuesto ellas atienden y me consultan, y yo les doy el visto bueno. Todavía no se animan a tomar una decisión. Yo trato de prepararlas para que sepan todo, porque, aunque me digan "no te vas" un día me va a tocar irme".


"Al asociado le diría que la mutual no es un sindicato, como piensan a veces; les explico que se paga un importe, que es un porcentaje de su sueldo; pero que cuenta con una capitalización, que es como una caja de ahorros, así sean mil pesos por mes, ellos no lo harían individualmente; se le agregan beneficios como subsidios; préstamos; cobertura de sepelio. Y todo dentro de la cuota societaria, sin pagar nada aparte.

Les diría que confíen y aprovechen lo que la mutual les da; siempre que vamos a armar algo nuevo vemos de no centrarnos en un solo lugar; aunque los del interior a veces te dicen "no"; pero, a través de las redes sociales, se van metiendo, y aunque muchos no tienen internet, de boca en boca va pasando".


"Al personal le diría que sigan trabajando con la misma fuerza, así la mutual puede seguir si todos aportamos; es cierto que algunos ponen más de sí y otros menos; pero si entre nosotros hay una parte que tira para atrás, la Mutual podría no resistir.

Les digo a las chicas que hay que trabajar; a veces nos quejamos si hay algún compañero que no le importa nada; pero nosotras nos tenemos que sentir tranquilas; con la conciencia limpia; porque lo que verdaderamente la mutual nos remunera a fin de mes, es por lo que le dimos al asociado, a los representantes y a la misma Mutual.

En cambio, esa persona que no se preocupa, en algún momento se va a sentir mal; eso es lo que siempre me enseñaron mis padres; hay que dar y no esperar el recibir; yo siempre hago eso; atiendo; hablo con la gente; escucho el problema del otro con atención.

Entiendo que eso es ser eficiente y qué todo lo que es sentimiento, emoción se transmite; sino habría un clima muy frío, muy técnico y no es así."


"Todo lo que pude decir tiene que ver conmigo, como soy yo y la verdad me encantó esta conversación y del modo que sentís a la mutualidad. Sin haberte conocido personalmente sabía que eras una excelente persona, ya que he leído un montón de cosas tuyas. Desde el papel, uno se imagina a una persona: la mirada; como habla y después cuando la ve personalmente, nos damos cuenta que todo eso era verdad".