05 de Agosto de 2022

Las personas que se asocian a una mutual experimentan un deslumbramiento inicial, porque, de estar abandonados a su propia suerte, de repente tienen una pertenencia y pueden acercarse a la entidad para resolver una necesidad.

Increíblemente, para su modo de pensar ya no están solas, se genera una cálida relación entre las personas que se agrupan en una mutualidad donde unos dependen de otros.

Se dice que los Valores que sustentan el sistema son el Esfuerzo Propio, la Ayuda Mutua y la Solidaridad.

Porque hay una práctica constante de la Ayuda Mutua, con la cuota que se paga se practica el valor de la Solidaridad, en el sentido de que se utiliza para recibir las propias prestaciones, pero si no las necesitamos en ese momento, por ejemplo, un servicio de salud, se contribuye con este aporte a que la mutual tenga la solvencia necesaria para acudir con ese servicio al asociado que sí lo necesita.

El importe de la cuota social o el mínimo aporte con que hay que contribuir para poder acceder a algún servicio sería el Esfuerzo Propio que hace cada asociado, y ese mismo servicio utilizado por cualquiera de los mismos, sería la Ayuda Mutua y la Solidaridad que es transversal a todo este sistema.


Todo esto nos hace saber que dependemos los unos de los otros para poder defendernos de los imprevistos y de las contingencias de la vida. Esta práctica nos condiciona para tener y practicar Valores Éticos y constatar que nuestros semejantes son tan valiosos para para la Mutual como nosotros mismos, al momento de tener que cubrir una necesidad.

Por eso la mutualidad está tan lejos del asistencialismo ya que da dignidad a la persona humana, cuando requiere servicios a través de un Esfuerzo Propio, que es la cuota social, sin hacer que la sociedad tenga que hacerse cargo de sus necesidades.

Como institución, se considera que una mutual es parte de la comunidad organizada para proveerse a sí misma de servicios y de este modo contribuye directamente al bienestar general.


Las Asociaciones Mutuales son sólidos pilares sobre los que se construyen las sociedades que practican la Democracia, la Solidaridad; la Ayuda Mutua; la Responsabilidad, la Igualdad y la Equidad, y cada uno de sus miembros, además, deben hacer gala del cumplimiento de los Valores Éticos de honestidad, transparencia, responsabilidad social y preocupación por los demás. Por lo que también es una importante fuente de formación ejemplo para las nuevas generaciones.