19 de Mayo de 2022

Nos encontramos en el comienzo de la semana de mayo, donde el día 25 de mayo de 1810 se recuerda como un paradigma revolucionario que logró liberar a las provincias del Río de la Plata, del Virreinato colonial de la corona española.

Se trató de una semana intensa, colmada de ideales y de pasiones, alentadas aún más con las noticias de Europa, con la llegada del buque de guerra inglés "Misletoe" con periódicos londinenses que relataban la invasión napoleónica a España. No obstante las precauciones del Virrey Cisneros de querer morigerar las noticias, estas se difundieron y a fin de calmar el fervor popular, el 17 de mayo ordena la impresión de un volante con una copia traducida de la "Gaceta de Londres" referente a los sucesos de España, pero omitiendo describir la dramática situación española.

El paso de Napoleón en la España de 1808, había generado un vacío de poder en el imperio español y justamente en ese mes de mayo, llega la noticia de la caída de la Junta Central de Sevilla, uno de los últimos bastiones de la corona. Podemos sintetizar esta memorable semana de la siguiente forma:

18 de mayo. El virrey Cisneros hizo leer por sus pregoneros una proclama en la que afirmaba que gobernaba en nombre del monarca Fernando VII. Así, el virrey advertía que en el caso de una total pérdida de la península y falta del Supremo Gobierno, asumiría el poder acompañado por otras autoridades de la Capital. Mientras tanto, la jabonería de Hipólito Vieytes y la casa de Nicolás Rodríguez Peña, se convertían en hervideros de ideas revolucionarias.

19 de mayo. Cornelio Saavedra y Manuel Belgrano le solicitaron al Alcalde de Primer Voto Lezica, la convocatoria a un Cabildo Abierto para discutir la situación política. Juan José Castelli hizo lo propio ante el Síndico Leiva.

20 de mayo. El Alcalde Lezica le informó al Virrey Cisneros sobre el reclamo de los vecinos. El virrey Cisneros reunió a los jefes militares y les pidió apoyo ante una posible rebelión, pero todos se rehusaron.

21 de mayo. A la mañana se reunió el Cabildo como todos los días, pero debió interrumpir sus labores porque un grupo de vecinos de la ciudad ocupó la Plaza de Mayo (entonces Plaza de la Victoria), para exigir la convocatoria a un Cabildo Abierto y la destitución del virrey Cisneros.

22 de mayo. Ya desde temprano llegaron los cabildantes. Concurrieron 251 participantes de los 450 invitados. La multitud volvió a tomar la plaza: French y Beruti lideraban la manifestación. Casi todos aprobaban la destitución del Virrey, pero no acordaban en quien debía asumir el poder y en qué forma. Castelli propuso que fuera el pueblo a través del voto quien eligiese una Junta de Gobierno mientras que Cornelio Saavedra era partidario de un gobierno organizado por el Cabildo.
23 de mayo. En la mañana se reúne el Cabildo a fin de contar los votos emitidos el día anterior y se elaboró un documento en el que el Virrey debía cesar en el mando y recaer éste provisoriamente en el Cabildo, hasta la creación de una Junta que ha de formar el mismo Cabildo.

24 de mayo. El Cabildo designo una Junta de Gobierno presidida por el Virrey e integrada por cuatro vocales: los españoles Juan Nepomuceno Solá y José de los Santos Inchaurregui y los criollos Juan J. Castelli y Cornelio Saavedra, burlando entonces la voluntad popular. Esto provocó la reacción de las milicias y del pueblo. Castelli y Saavedra renunciaron a integrar esta Junta y otros como Manuel Belgrano fueron perdiendo la paciencia. Por la noche una delegación encabezada por Castelli y Saavedra se presentó en la casa de Cisneros con cara de pocos amigos y lograron su renuncia. Así, la Junta quedó disuelta y se convocó nuevamente al Cabildo para la mañana siguiente.

EL 25 DE MAYO DE 1810
Aquel 25 de mayo de 1810 se indica como un amanecer lluvioso y frio, no obstante, la sensación térmica provocada por los patriotas era distinta. French y Beruti encabezaban la marcha de un grupo de vecinos y milicianos que se fueron juntando frente al edificio del Cabildo. No obstante, no se trataba de un planteo militar de soldados dóciles a sus comandantes, los milicianos de mayo tenían conciencia de ser el pueblo en armas y fueron ellos, los soldados y las clases, pero no así sus disconformes comandantes.

Horas interminables, con lluvia y frío, con las discusiones de los cabildantes cada vez más intensas. Por un lado, los jefes militares que había convocado el Cabildo manifestaban que no podían mantener a la Junta en el poder atento que corrían riesgos personales porque sus tropas no les responderían y por otro el pueblo se encontraba disgustado y en conmoción porque no aceptaba al Virrey en la Junta y mucho menos, con el mando de las armas.

Finalmente, se anunció la renuncia de Cisneros y la formación de una Junta de Gobierno local, integrada por siete criollos y dos españoles, encabezada por el militar americano Cornelio Saavedra. Los integrantes de esta Primera Junta juraron fidelidad a Fernando VII, a fin de ganar tiempo mientras consolidaban el ?status quo? frente a los realistas. Se interpreta que esto fue una estrategia llamada "la Máscara de Fernando", porque gobernaban a nombre de Fernando VII, pero el objetivo real era declarar la independencia. Esta postura se mantendría hasta el 9 de julio de 1816. Sin embargo, los españoles no se lo creyeron y se resistieron a aceptarla.

Bajo estas circunstancias, el ex Virrey Cisneros como los miembros de la Audiencia intentaron escapar a Montevideo y unirse con el Gobernador Francisco Javier de Elio, no obstante, fueron arrestados y enviados a España en un buque inglés.

A partir de la Revolución de Mayo comienza la disolución del Virreinato del Río de la Plata, dando lugar a la formación de cuatro estados independientes, la Argentina, Paraguay, Uruguay y Bolivia.

Asimismo, se destaca la eliminación del monopolio y la instauración del libre comercio que posibilitó que los estancieros rioplatenses pudiesen exportar sus productos.

Mucho más podríamos hablar de nuestra breve pero apasionante historia. Una historia llena de deseos de surgir como nación libre y soberana. De ser jurídicamente previsible, económicamente pujante, socialmente inclusiva... La historia de lo que pudimos haber sido. En definitiva, hoy el pueblo sigue queriendo saber de que se trata.

Hasta la próxima. -